Cocinar con niños puede ser una actividad muy gratificante, tanto para los mayores como para los más pequeños. Además, es una buena oportunidad para crear lazos y aprender hábitos saludables.
En el blog de hoy te damos algunos consejos para cocinar con los más pequeños de casa para que disfruten todos juntos de esta actividad en familia.
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Empieza por recetas fáciles y divertidas. Si decides preparar un plato demasiado elaborado, probablemente los niños se aburrirán y acabarán perdiendo interés. Es mejor optar siempre por recetas rápidas y fáciles para que los niños tengan la oportunidad de participar en casi todo el proceso de cocina.
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Déjales tomar decisiones. Para despertar el interés de los niños nada mejor que darles la oportunidad de decidir qué quieren cocinar. Hazles responsables de casi todo el proceso de cocina.
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Involúcralos en todo el proceso de desarrollo de la receta. Podeis ir todos juntos al mercado o supermercado a comprar todos los ingredientes necesarios para llevar a cabo la receta que hareis juntos.
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Detalla claramente las tareas antes de empezar la receta. Puedes asignarles las tareas más razonables y de menor riesgo, como mezclar, adornar, remover, añadir ingredientes, etc. ¡Los harás sentir bien con muy poco!
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Proporciona un área de trabajo segura para los niños. Manténgalos alejados de fuentes de calor y no tengas a mano objetos afilados como tijeras o cuchillos.
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Prepara todos los ingredientes antes de que el niño entre en la cocina. Ésta es la clave para controlar el desorden potencial y centrarse en las recetas y no en otras cosas.
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Explica qué es cada ingrediente y su función en la receta. De esta forma, mientras se divierten cocinando, también aprenderán hábitos saludables y cómo relacionarse con los ingredientes, así como de dónde provienen.
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Aprenderán habilidades matemáticas, como la suma de unidades de las cantidades de ingredientes, las fracciones a la hora de cortar alimentos en trozos más pequeños, contar el número de cucharadas...
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Anímales en lo que hacen bien. Su autoestima se potenciará y querrán seguir cocinando. A todos nos gusta que nos digan lo que hacemos bien, y más si estamos en un proceso de aprendizaje continuo como los niños.
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Puedes ir aumentando la dificultad. Sin embargo, si ves que salen solos en el proceso de cocina, puedes introducir recetas más complejas, con más ingredientes, más utensilios de cocina, más pasos de preparación...
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Enséñalos a reciclar. Cuando se cocina, se genera una gran cantidad de desechos, ya sea plástico de los envases de los alimentos utilizados o partes de los alimentos que no utilizamos. Enséñales a qué cubo tiene que ir cada cosa y guardar aquellos alimentos que aún se pueden aprovechar para hacer otra receta. Aprovecha para introducir la importancia de la
comida de aprovechamiento, saludable y de proximidad.
Estos son algunos de los consejos que te proponemos para cocinar con los más pequeños de casa, ¡la diversión está garantizada! Te dejamos algunas
recetas fáciles y saludables para ponerlas en práctica juntos.
¿Te atreves?